La salud del papa Francisco: un cuadro clínico complejo
Las condiciones clínicas del papa Francisco se han mantenido estables, aunque complejas, tras 19 días ingresado en el hospital Gemelli de Roma debido a una insuficiencia respiratoria. Según la Santa Sede, el pontífice de 88 años no ha presentado episodios de insuficiencia respiratoria ni broncoespasmo en la jornada de este martes.
A pesar de ello, Francisco continúa recibiendo altos flujos de oxígeno y retomará la ventilación mecánica no invasiva durante la noche. Su pronóstico sigue siendo reservado, lo que indica que los médicos no han especificado la evolución de su cuadro clínico.
El papa ha alternado la oración y el reposo durante su estancia en el hospital, manteniéndose consciente y colaborando con las terapias. A pesar de haber sufrido cuatro crisis en apenas diez días, los médicos consideran que su situación es compleja pero estable.
En cuanto a su tratamiento, se le practicaron dos broncoscopias para aspirar las secreciones producidas por los pulmones a causa de la neumonía bilateral que padece. A pesar de haber superado una insuficiencia renal al inicio de su hospitalización, los médicos creen que las crisis respiratorias pueden repetirse.
El papa Francisco ha continuado con la fisioterapia respiratoria y el apoyo de oxígeno de alto flujo a través de cánulas nasales. Mientras tanto, en la plaza de San Pedro se ha convocado a rezar por su salud, demostrando la preocupación y el apoyo de fieles de todo el mundo.
En cuanto a sus actividades como líder religioso, el papa no presidirá el rito del Miércoles de Ceniza en persona, siendo reemplazado por el cardenal Angelo De Donatis. Además, se informó que a partir del 9 de marzo comenzarán los Ejercicios Espirituales, en los cuales los miembros de la Curia romana participarán en comunión espiritual con el Santo Padre.
En resumen, la salud del papa Francisco sigue siendo motivo de preocupación y atención por parte de la comunidad católica y de la sociedad en general. Su complejo cuadro clínico ha mantenido a todos en vilo, esperando su pronta recuperación y retorno a sus actividades habituales.