El exencargado especial para los asuntos de Venezuela e Irán durante la administración de Donald Trump, Elliot Abrams, ha expresado su preocupación por la inhabilitación de la dirigente política María Corina Machado.
Según Abrams, esta medida es un duro golpe a la política de Estados Unidos hacia Venezuela y demuestra que el régimen de Maduro no está interesado en permitir una presidencia libre en 2024 o incluso una elección parcialmente libre.
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Además, Abrams cree que esta jugada podría ser el primer paso para prohibir por completo las primarias planeadas por la oposición.
En su opinión, las negociaciones entre el régimen y las fuerzas democráticas, realizadas en México, son imposibles de tomar en serio después de la jugada contra Machado.
Por lo tanto, la política de Biden, que se ha construido en torno a la negociación con el régimen para las elecciones, está muerta.
Con información de cfr.org