El Consejo Nacional Electoral (CNE) presentó un cronograma que implica reiniciar todas las fases que la Comisión Nacional de Primaria (CNP) había estado llevando a cabo de manera autogestionada. Esto significa que incluso el proceso de postulación de candidaturas debe realizarse nuevamente, a pesar de que ya se habían admitido los 13 candidatos que participarán en las elecciones primarias. La propuesta del cronograma plantea varias interrogantes, una de ellas es si se permitirá la postulación de nuevos actores en los tres días establecidos en el calendario, en caso de aceptarse la asistencia técnica. Otra pregunta es si se garantizará la participación de los inhabilitados: María Corina Machado, Henrique Capriles y Freddy Superlano. El voto en el exterior es otro elemento que queda sin respuesta. Aunque hay un punto relacionado con la generación del Registro Electoral, el padrón de votantes reconocido por el CNE incluye a poco más de 107 mil de los más de 7 millones de connacionales que se encuentran en otros países. ¿Aceptaría el órgano electoral trabajar con el registro ad hoc creado por la comisión de primaria para permitir la participación de los migrantes? Parece poco probable. Bajo estos términos, la elección del candidato presidencial opositor tendría que posponerse para el 19 de noviembre.
Efecto Cocuyo consultó a expertos que evaluaron la propuesta del CNE y compartieron sus opiniones al respecto. El ingeniero Mario Torre, miembro del Grupo de Seguimiento Técnico (GST), responsable de realizar auditorías al sistema automatizado de votación en más de once procesos electorales en el país, considera que las auditorías propuestas por el CNE son “insuficientes”. Afirma que el tiempo ofrecido para las auditorías es claramente insuficiente, especialmente considerando que este sistema es nuevo y no ha sido evaluado completamente desde que es manejado por el equipo de Exclé. Torre señala que el cronograma presentado deja fuera la auditoría de predespacho y la auditoría de telecomunicaciones. Además, considera que el temor de que la identidad del elector sea conocida por el CNE inhibirá la participación, especialmente de aquellos que dependen de programas sociales del gobierno chavista.
Por otro lado, el exrector del CNE, Vicente Díaz, está a favor de la asistencia técnica. Considera que las primarias realizadas con el CNE fueron procesos impecables y que siempre prefiere que se realicen con el CNE para que haya una corresponsabilidad del Estado en caso de que algo salga mal. Opina que el CNE no está para complacer solo al Psuv, sino a cualquier sector político que lo requiera.
En cuanto al cronograma, Díaz considera que debe ser estudiado por la Comisión Nacional de Primaria para determinar qué aspectos son pertinentes. En cuanto a las postulaciones, señala que ya hay 13 candidaturas listas y que se debe establecer un día para cargarlas en el sistema. Además, cree que se debe utilizar el Registro Electoral que ya generó la CNP. Destaca que hacer la primaria con el CNE tiene ventajas como evitar conflictos en el escrutinio y la totalización, facilitar las auditorías y el control de la elección, y votar en centros de votación protegidos por la fuerza pública venezolana.
Por otro lado, el doctor en ciencias políticas, abogado y exrector del CNE, Luis Salamanca, considera que detrás del ofrecimiento del Poder Electoral está la intención de desmontar y desarmar todo lo que ha hecho la CNP, poner las primarias bajo el control del CNE y generar una confrontación.