Este dron ucraniano asesta golpe millonario a Rusia en una sola noche. Y la preocupación mayor para Putin es que estos audaces bombardeos con drones suicidas puedan mantenerse
La guerra en Ucrania sigue causando enormes pérdidas económicas a ambos bandos. Pero en las últimas horas, el país invadido por Rusia puede celebrar un importante golpe propinado al ejército invasor. Según informaciones oficiales, un novedoso dron ucraniano de fabricación secreta habría destruido equipamiento militar ruso valuado en varios millones de dólares durante un rápido ataque nocturno.
El anuncio sobre este exitoso asalto aéreo con drones llegó de parte del exviceprimer ministro de Ucrania, Mykhailo Fedorov. El alto funcionario utilizó su canal de Telegram para comunicar al país que las fuerzas armadas ucranianas han logrado un nuevo triunfo tecnológico en esta prolongada contienda.
Un arma ucraniana envuelta en el misterio
Pocos detalles se conocen hasta ahora sobre las capacidades de este nuevo dron de combate desarrollado por Ucrania. El hermetismo es comprensible, dado que preservar el factor sorpresa respecto a armamento de punta puede ser decisivo en el curso de la guerra.
Según los escasos datos difundidos, el aparato no tripulado sería capaz de operar con precisión letal en misiones nocturnas. Gracias a avanzados sistemas de visión térmica y guiado láser, el dron puede detectar y destruir vehículos, tanques y posiciones enemigas bajo cubierta de oscuridad.
Expertos coinciden en que el despliegue de esta tecnología de sigilo demuestra la creciente capacidad militar de Ucrania. Y anticipan nuevos golpes certeros en las líneas de suministro y centros de mando rusos.
Golpe económico a la maquinaria bélica del Kremlin
Más allá del impacto moral para la tropa invasora, esta hazaña con drones inflige severos daños monetarios a la máquina de guerra del Kremlin.
Según las cifras reveladas, en apenas una noche de ataques, los drones ucranianos destruyeron vehículos y equipos de Rusia valuados entre USD $5 a $10 millones de dólares. Considerando el alto costo de reemplazar blindados, camiones, sistemas de misiles y radar dañados, el golpe al bolsillo del Kremlin es significativo.
Y la preocupación mayor para Putin es que estos audaces bombardeos con drones suicidas puedan mantenerse e incluso incrementarse en el tiempo. Obligando a Rusia a desviar más recursos para contrarrestar esta letal e insidiosa nueva amenaza surgida en los cielos ucranianos.
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