Venezuela y Guyana comparecieron ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para presentar sus argumentos a favor y en contra del referendo consultivo sobre el Esequibo, convocado por el gobierno de Nicolás Maduro y programado para el 3 de diciembre. La CIJ llamará nuevamente a ambas partes para anunciar su decisión sobre la solicitud de Guyana de imponer medidas cautelares que impidan a Venezuela llevar a cabo la consulta popular, y se espera que esto ocurra antes del 3 de diciembre.
Sin embargo, el experto en Derecho Internacional, Juan Sainz Borgo, no espera que la CIJ decida en contra de la elección venezolana, ya que considera que es un asunto interno. No obstante, la CIJ podría pedir a ambas partes que se abstengan de realizar ejercicios militares que puedan generar tensiones en la zona en disputa. Para Sainz Borgo, la Corte podría llamar a respetar su papel y evitar cualquier acción que perjudique el caso, lo cual podría favorecer a Venezuela, ya que, de acuerdo con el Acuerdo de Ginebra, Guyana no debería otorgar concesiones petroleras en el área en disputa.
Durante el proceso, se destacó que la delegación de Venezuela fue más numerosa que la de Guyana. Además, se señaló que Venezuela acusa a Guyana de llevar a cabo ejercicios militares conjuntos con el Comando Sur de los Estados Unidos en el Esequibo, mientras que Guyana argumenta que el referendo consultivo busca socavar la autoridad de la CIJ y tomar medidas unilaterales para anexar el territorio en disputa.
El experto en Derecho Internacional y Diplomacia, Mariano de Alba, considera que lo más probable es que la solicitud de Guyana sea negada y se le pida a la CIJ que ordene suspender el referendo o que se eliminen las preguntas que plantean desconocer el Laudo Arbitral de 1899 y crear el estado Guayana Esequiba.
En cuanto a los argumentos presentados por Venezuela, se destaca que el Tribunal Supremo de Justicia declaró la constitucionalidad de las preguntas del referendo y que Venezuela se compromete a respetar el derecho internacional y no recurrir al uso de la fuerza para hacer valer la voluntad del pueblo venezolano. Sin embargo, el abogado senegalés Makane Moide Mbengue advirtió que la afirmación de la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, de que “nada impedirá” el referendo podría interpretarse como un desafío a la autoridad del tribunal.
En conclusión, la CIJ está evaluando los argumentos presentados por Venezuela y Guyana en relación con el referendo consultivo sobre el Esequibo. Aunque no se espera que la Corte decida en contra de la elección venezolana, podría pedir a ambas partes que se abstengan de realizar acciones que perjudiquen el caso. La decisión de la CIJ se espera antes del 3 de diciembre.