Javier Milei, el líder de La Libertad Avanza y conocido como “El Rey, El León, El Loco, el Rara Avis”, se convirtió en el presidente electo de Argentina este domingo. En su primer discurso tras la victoria electoral, Milei afirmó que “hoy empieza la reconstrucción de Argentina”. Su triunfo en segunda vuelta sobre el ministro de Economía, Sergio Massa, marca un hito importante, ya que pone fin al dominio en las urnas del peronismo/kirchnerismo versus el antiperonismo/macrismo, y lo convierte en el primer economista en llegar a la Casa Rosada.
Argentina ha estado luchando con una inflación galopante, que actualmente supera el 140% anual, y altos índices de pobreza, con alrededor del 40% de la población por debajo de la línea de pobreza. Milei propone un cambio radical que incluye la dolarización de la economía, la eliminación del Banco Central y una reducción drástica del tamaño del Estado, suprimiendo ministerios, eliminando obras públicas y privatizando empresas estatales. Su enfoque se basa en ideas “minarquistas” y la reducción del gasto público.
Durante la campaña, Milei recibió críticas y acusaciones de ser incendiario y retrógrado, pero su mensaje resonó con más del 55% de los votantes. El hartazgo con la clase política tradicional y la falta de alternativas fue un factor clave en su victoria, según expertos consultados por BBC Mundo. La sensación de crisis infinita en Argentina habilitó un discurso más radical y la idea de probar con lo nuevo, afirman.
Javier Milei nació el 22 de octubre de 1970 en Buenos Aires y creció en el barrio de Villa Devoto en una familia de clase media. Su padre era dueño de varias líneas de transporte y su madre era ama de casa. Desde joven, Milei mostró una personalidad única y recibió el apodo de “El Loco”. Jugó como portero en el Club Atlético Chacarita Juniors y considera que este puesto reflejaba su carácter singular.
Sin embargo, su infancia estuvo marcada por la violencia. Milei ha hablado abiertamente sobre el maltrato físico y psicológico que sufrió por parte de su padre. Según él, en lugar de debilitarlo, esta experiencia lo fortaleció y le dio una mentalidad de no tener miedo a nada.
El líder libertario no ha estado solo en su camino hacia la presidencia. Su hermana, Karina Milei, ha sido una pieza clave en su vida y en la campaña de La Libertad Avanza. Milei ha comparado su relación con Karina con la de Moisés y Aarón en la Biblia, diciendo que ella es su “Aarón” y su comunicadora. También ha expresado su intención de convertirse al judaísmo y ha sido crítico con el papa Francisco.
En cuanto a su vida personal, Milei es amante del rock y lideró una banda llamada “Everest”. También es apasionado de la ópera y tiene un gran amor por sus perros, a los que ha agradecido su triunfo en las primarias. No tiene hijos ni ha convivido con una pareja.
El triunfo de Javier Milei marca un nuevo capítulo en la historia política de Argentina. Con un discurso rupturista y propuestas audaces, Milei espera reconstruir el país y devolverle su estatus de potencia mundial. Ahora, queda por ver cómo se desarrollarán sus políticas y si logrará cumplir sus promesas de cambio.
Con información de efectococuyo.com