La organización de asistencia humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) ha emitido una alerta sobre el récord del cruce de 500 mil migrantes por el tapón del Darién, la selva que divide a Colombia y Panamá, en este 2023.
Según MSF, estos números duplican a los registrados en todo el 2022, cuando atravesaron esa peligrosa ruta 248 mil personas que intentaron llegar a Estados Unidos desde países como Colombia, Ecuador, Haití, Venezuela y naciones de África.
“La cifra de migrantes que han cruzado la selva equivale a más del 11 % de la población de Panamá. Esta es una crisis sin precedentes a la que no se ha volcado la suficiente atención global ni regional; no se han garantizado rutas seguras a los migrantes, ni suficientes recursos para las organizaciones que los atienden”, dijo Luis Eguiluz, coordinador general en Colombia y Panamá de MSF, en un boletín de prensa de la organización.
Médicos Sin Fronteras denuncia la falta de atención médica para este número de personas, mientras que hay “una respuesta insuficiente e inadecuada” en las diferentes estaciones de recepción migratoria del lado panameño.
“Lo que hemos evidenciado y escuchado de ellos (migrantes) es que quienes transitan por el sur del continente están expuestos a una situación de extrema vulnerabilidad: hambre, ausencia de alojamientos y fuentes de agua, cobros excesivos, desinformación y estafas, xenofobia y violencia física, psicológica y sexual. Todo esto inicia mucho antes de que los migrantes lleguen a la selva del Darién, aunque sea allí en donde se hace evidente”, explicó sobre el monitoreo que han hecho desde las rutas al Darién en Colombia.
Mencionaron que una de las rutas que no se atiende es la del puente Rumichaca, en la frontera entre Colombia y Ecuador. Igualmente dijeron que los episodios de violencia sexual, intentos de secuestro y otras acciones que toman grupos delictivos que operan en esas rutas.
“Según testimonios de los migrantes con menos recursos económicos, en la ruta por Ecuador solo encuentran apoyo en dos ciudades: Ibarra y Tulcán, muy cerca de Colombia. Luego, en Ipiales, organizaciones locales con fondos internacionales, tienen algunos albergues en los que los migrantes pueden acceder a una ducha, hospedaje una noche y a tres platos de comida, pero luego deben salir”, sostuvo el coordinador de MSF.
La organización señala que desde finales de abril del año 2021 dan atención médica a la población en tránsito que llega a Panamá. Tienen puntos de atención en dos estaciones de Lajas Blancas y San Vicente y la comunidad indígena Bajo Chiquito.
“De enero a octubre de 2023, MSF realizó 51.500 consultas médicas y de enfermería, incluyendo prenatales y postnatales. 18.000 consultas fueron a menores de 15 años y 888 a mujeres embarazadas. Además, MSF brindó 2.400 consultas de salud mental y atendió 397 casos de violencia sexual, sobre los que lanzó una alerta recientemente”.
En una visita reciente a Caracas, el presidente colombiano Gustavo Petro propuso a su par venezolano, Nicolás Maduro, y al gobierno de Estados Unidos financiar económicamente a las personas que intentan cruzar el Darién, a fin de estimularlos a volver a sus países de origen.
“Con Estados Unidos hay que llegar a un acuerdo con relación a la migración. Hemos hecho varias propuestas, ese éxodo que viene del sur desde Chile y se engrosa en Colombia y trata de pasar por el tapón del Darién debe desviarse a sus países de origen, especialmente a Venezuela”, dijo desde el Palacio de Miraflores junto a Maduro.
Estados Unidos endureció los controles migratorios desde mayo de este año cuando llegó a su fin el Título 42, un mecanismo que aplicó el gobierno de Donald Trump que permitía expulsar a migrantes de forma expedita.
Sin embargo, las decisiones de ese país reciben críticas de organizaciones humanitarias y defensoras de derechos humanos.
En entrevista para Efecto Cocuyo, Juan Pappier, subdirector de la división para las Américas de Human Rigths Watch, dijo el pasado 21 de noviembre que las decisiones de la Casa Blanca tienen mucho que ver con el crecimiento del flujo migratorio desde el sur de México.
“La evidencia sugiere, de forma sólida, el impacto que ha tenido estas políticas de EE. UU. ha contribuido a que haya más personas migrantes cruzando el Darién”, dijo en la conversación con la directora general de este medio, Luz Mely Reyes.
Pappier pidió a los países de América una mejor coordinación y propuso la creación de un “estatuto temporal de protección para los haitianos y venezolanos, que no sea solo por un año, debe ser por un período más largo”.
Con información de Efecto Cocuyo