Venezuela rechazó la solicitud de la Comunidad del Caribe (Caricom) de acatar la decisión de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de abstenerse de tomar cualquier acción que modifique la situación del territorio en disputa con Guyana. En un comunicado, el Gobierno venezolano acusó a la Caricom de mentir y omitir intencionalmente el hecho de que la CIJ rechazó la pretensión de Guyana de impedir el referendo sobre la disputa territorial. Venezuela instó a los países de la Caricom a ser objetivos y retomar la cooperación y la paz en la región.
La Caricom, por su parte, exhortó a Venezuela a cumplir fielmente con la ley internacional y los estatutos de las Naciones Unidas, y a no tomar ninguna acción violenta. La CIJ acordó que ambas partes se abstengan de realizar acciones que puedan agravar o prolongar el litigio, advirtiendo sobre el riesgo de que Venezuela tome medidas adicionales después del referendo. Sin embargo, el tribunal no solicitó directamente a Caracas cancelar la consulta.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que su país dio una “paliza histórica” al Gobierno de Guyana y a la petrolera ExxonMobil, denunciando los intereses indebidos de esta última en la zona en disputa. Por su parte, el presidente guyanés, Irfaan Ali, instó a Venezuela a acatar el fallo vinculante de la corte.
Venezuela reconoce el Acuerdo de Ginebra, firmado en 1966 con Reino Unido, como el único instrumento legal para resolver la controversia, pero las negociaciones basadas en este acuerdo no han dado resultados y Guyana busca una solución a través de la CIJ.