Antonia Pérez, una activista chavista desde la llegada de Hugo Chávez al poder en 1998, se encontraba cerca de un toldo azul ubicado cerca del liceo Mariano Picón Salas en Petare, al este de Caracas, el pasado domingo 3 de diciembre. En ese lugar, se llevaba a cabo un referendo consultivo sobre el territorio Esequibo. Junto a Antonia, había otras seis mujeres vestidas con camisas blancas y portando el mapa de Venezuela que incluía la zona en disputa del Esequibo. Durante la jornada, Antonia expresó su sorpresa y resignación al notar la escasa participación de votantes. Afirmó que nunca había presenciado un proceso tan flojo en todas las elecciones en las que había trabajado para el gobierno.
Aunque las autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE) prorrogaron el proceso consultivo hasta las 8 pm, un recorrido realizado por Efecto Cocuyo por ocho centros de votación en los municipios de Sucre, Libertador, Chacao y Baruta, en el Área Metropolitana de Caracas, reveló que no había votantes haciendo fila para participar en la jornada.
En el municipio Sucre, específicamente en el centro electoral José de Jesús Arocha en Petare, la poca presencia de votantes se justificó por la rapidez con la que se llevaba a cabo el proceso. Aunque el centro tenía más de 8 mil votantes registrados, las sillas habilitadas para que los electores esperaran su turno estaban vacías. Evelia Bolívar, técnico de soporte en ese centro de votación, comentó que el proceso había sido fluido, pero que estas elecciones eran diferentes y habían tenido poca participación.
En el liceo Santo Tomás de Villanueva en el municipio Baruta, solo había votado alrededor del 30% de los electores a las 4:30 pm. Milagros Ramírez, coordinadora de ese centro, explicó que la gente sabía cómo votar, lo que agilizaba el proceso y evitaba la formación de filas.
En el liceo Miguel Antonio Caro en la avenida Sucre de Catia, solo tres electores ejercieron su derecho al sufragio mientras Efecto Cocuyo estaba presente. Maigualida Gómez, coordinadora del centro de votación, indicó que alrededor de 1.500 electores habían votado hasta las 5 pm, de un total de aproximadamente 5 mil votantes.
En el liceo Andrés Bello en La Candelaria, uno de los centros de votación más grandes de la ciudad con más de 12 mil personas habilitadas para votar, no había electores haciendo fila a las 5:20 pm. Patria América Zapata, activista chavista, afirmó que la participación había sido masiva, pero que el sistema era tan rápido que no se vieron las típicas colas. Sin embargo, los pasillos vacíos y las caras largas de los coordinadores y milicianos daban una impresión contradictoria.
En los centros de votación del municipio Chacao, había más gente en los alrededores de los centros comerciales que en los centros de votación. En la Escuela Municipal Andrés Bello, solo participó el 15% del electorado, según un funcionario del Plan República. En contraste, la plaza Bolívar estaba llena de personas conversando y disfrutando de la decoración navideña.
En resumen, la jornada del referendo consultivo en Venezuela tuvo una baja participación de votantes, lo que sorprendió a los activistas chavistas que trabajaron en los centros de votación. Aunque el proceso fue ágil y no se formaron filas, la escasa afluencia de votantes contrastaba con la experiencia de elecciones anteriores.