La vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, ha rechazado enérgicamente las declaraciones del presidente de Exxon Mobil, Alistair Routledge, quien afirmó que las medidas adoptadas por Guyana para fortalecer su relación con países como Estados Unidos en el área de defensa y seguridad son positivas. Routledge hizo estas declaraciones durante una entrevista con el portal web News Sourcegy.
En sus declaraciones, Routledge también mencionó que Exxon Mobil planea perforar dos pozos en el oeste de las zonas de Liza y Payara, con un costo estimado de entre 60 y 70 millones de dólares cada uno, según medios guyaneses.
El presidente de Exxon Mobil afirmó que el acuerdo entre la compañía y Guyana es legal y que se sienten seguros de que su contrato es válido tanto bajo las leyes locales como según el derecho internacional, lo que les otorga derechos legítimos sobre los bloques en los que participan.
Sin embargo, la vicepresidenta Rodríguez no tardó en responder a las declaraciones de Routledge. A través de X, afirmó que la trasnacional energética no solo está socavando la soberanía de Guyana y ejerciendo influencia sobre las altas autoridades del país, sino que también está respaldando operaciones ilegales en una zona marítima pendiente de delimitación, todo esto bajo el amparo de los Estados Unidos y en complicidad con Guyana.
La vicepresidenta enfatizó que estas acciones violan claramente los Acuerdos de Argyle y la legalidad internacional. Además, reiteró que el gobierno de Venezuela no descansará en su defensa por el Esequibo, territorio en disputa entre ambos países.
En resumen, la vicepresidenta Rodríguez ha rechazado las declaraciones del presidente de Exxon Mobil y ha denunciado las acciones de la compañía, acusándola de socavar la soberanía de Guyana y respaldar operaciones ilegales en una zona marítima disputada. El gobierno de Venezuela se mantiene firme en su defensa por el Esequibo y afirma que estas acciones violan los Acuerdos de Argyle y la legalidad internacional.