Los pescadores de Pampatar levantan su voz en rechazo a la construcción del Santuario de Fauna Waterland Mundo Marino, un proyecto que amenaza su sustento y el de sus familias.
Según Andrés Vicente Marcano, pescador artesanal de la zona, esta iniciativa acabaría con el eje pesquero de Pampatar hasta la Isleta, afectando a toda la comunidad de treneros en la región.
El malestar de los pescadores se hace evidente al enterarse de este proyecto a través de publicaciones en redes sociales, sin haber sido consultados previamente.
La incertidumbre y la preocupación por el futuro de su actividad pesquera son palpables entre quienes dependen del mar para subsistir.
“Si el Gobierno Nacional tiene una política del reguardo de la sardina, ¿esto qué significa?” cuestiona Marcano, señalando la contradicción entre la supuesta protección de ciertas especies marinas y la implementación de un proyecto que impactaría negativamente en la pesca artesanal local.
Santuario de Fauna Waterland Mundo Marino
El rechazo a la construcción del santuario no solo proviene de los pescadores de Pampatar, sino también de otras comunidades pesqueras cercanas como Playa Moreno, Valdez, Bella Vista y la Isleta.
Todos ellos temen que esta iniciativa traiga consigo consecuencias desfavorables para sus medios de vida, generando un panorama incierto y desafiante para el futuro de la pesca en la región.
Ante esta situación, los pescadores instan a las autoridades a escuchar sus preocupaciones y a considerar el impacto que el Santuario de Fauna Waterland Mundo Marino tendría en sus vidas y en la economía local.
El llamado es claro: se requiere un diálogo abierto y transparente que permita encontrar soluciones que protejan tanto la biodiversidad marina como el sustento de las comunidades pesqueras.