Las federaciones de Estados Unidos y México anunciaron el lunes su retirada de la candidatura conjunta para ser sede de la Copa Mundial Femenina de fútbol en 2027. En su lugar, se enfocarán en postularse para albergar el torneo en 2031.
Con esta decisión, Brasil y un proyecto conjunto entre Alemania, Holanda y Bélgica quedan como los principales contendientes para organizar la Copa del Mundo femenina en 2027. La elección de la sede se llevará a cabo en el Congreso de la FIFA que se celebrará el 17 de mayo en Bangkok.
La federación estadounidense señaló que la candidatura para 2031 buscará garantizar una inversión equitativa por parte de la FIFA en las Copas del Mundo masculina y femenina.
El año pasado, la FIFA anunció planes de destinar 896 millones de dólares en premios para la Copa del Mundo masculina de 2026 que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá. En contraste, asignó 110 millones de dólares en premios para el Mundial femenino del año pasado en Australia y Nueva Zelanda.
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“Al modificar nuestra candidatura, podremos organizar una Copa Mundial Femenina sin precedentes en 2031, lo que contribuirá al crecimiento y al nivel del fútbol femenino tanto a nivel nacional como global”, expresó Cindy Parlow Cone en un comunicado.
En su propuesta detallada en diciembre, la USSF incluyó sitios en Estados Unidos que formaban parte de los 11 estadios designados para la Copa del Mundo masculina de 2026. Por su parte, México contempló a Guadalajara, Ciudad de México y Monterrey, sus tres sedes para el Mundial masculino, y además consideró a León y Querétaro como posibles sedes para 2027.
AP