La reconocida cantante Britney Spears y el modelo Sam Asghari han finalizado oficialmente su proceso de divorcio después de nueve meses desde que se anunció su separación.
Tras poner fin a un matrimonio de 14 meses, los papeles del divorcio fueron presentados por la abogada de Spears, Laura Wasser, y ahora solo se espera la aprobación final de un juez, según informes de TMZ.
El acuerdo de divorcio se resolvió sin disputas respecto al acuerdo prenupcial firmado antes de su unión, el cual protege la fortuna de Spears, estimada en 60 millones de dólares, según medios internacionales.
Page Six destaca que ambas partes mostraron una postura cooperativa y respetuosa durante este proceso. Asghari, a través de su abogado Neal Hirsh, decidió no oponerse a los términos preestablecidos, lo que indica un cierre amistoso a su corta vida en común.
Britney se queda con “joyería personal” y retiene las ganancias económicas que tuvo antes, durante y después del matrimonio, según informa Page Six. Otros bienes adicionales serán divididos de acuerdo con su acuerdo prenupcial.
Spears y Asghari comenzaron su relación en 2017 después de conocerse en el set del video de la canción “Slumber Party”. La pareja hizo pública su relación y en septiembre de 2021 anunciaron su compromiso, el cual se formalizó en una boda en junio de 2022.
El divorcio fue solicitado por Asghari en agosto pasado, citando “diferencias irreconciliables” como argumento para su distanciamiento y señalando el 28 de julio como la fecha de separación.
A pesar del fin de su matrimonio, el modelo expresó a través de una historia de Instagram su amor y respeto hacia Spears, pidiendo comprensión y privacidad en este difícil momento.
“Después de 6 años de amor y compromiso mutuo, mi mujer y yo hemos decidido poner fin a nuestro viaje juntos. Nos aferraremos al amor y al respeto que nos tenemos y le deseo lo mejor siempre”, escribió en sus redes sociales.