La Comisión Electoral Independiente (IEC) de Sudáfrica confirmó el domingo la disminución en el apoyo electoral al Congreso Nacional Africano (CNA), el partido fundado por Nelson Mandela, que obtuvo la victoria en las elecciones generales del miércoles pasado pero perdió su mayoría absoluta por primera vez en treinta años.
El CNA consiguió 159 de los 400 escaños de la Asamblea Nacional (Cámara Baja del Parlamento), según confirmó el presidente de la IEC, Mosotho Moepya, durante el anuncio oficial de los resultados en Johannesburgo, en presencia del líder del CNA y presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa.
Con aproximadamente el 40,20 % de los votos, el CNA, que ha asegurado que Ramaphosa seguirá liderando el partido, deberá negociar con otras formaciones por primera vez desde la finalización del régimen segregacionista del ‘apartheid’ y el establecimiento de la democracia en 1994.
Estos resultados representan una caída de 17 puntos en comparación con las elecciones anteriores de 2019 y la pérdida de 71 escaños en la Asamblea Nacional, donde anteriormente tenía una mayoría cómoda de 230.
AD en segundo lugar
En segundo lugar se ubica la Alianza Democrática (AD, centro-derecha liberal) liderada por el blanco John Steenhuisen, que mejora ligeramente sus resultados con el 21,80 % de los votos y 87 escaños en la Cámara.
La AD es el principal partido de oposición, heredera de la dirigencia política blanca que se oponía al ‘apartheid’ y tradicionalmente asociada al voto de la minoría blanca, que representa el 7,70 % de la población sudafricana.
La sorpresa la ha dado el uMkhonto weSizwe (Partido MK), la nueva formación del expresidente Jacob Zuma (2009-2018), que ha irrumpido en sus primeras elecciones generales con el 14,60 % de los votos.
El Partido MK ha arrebatado la tercera posición a los Luchadores por la Libertad Económica (EFF, en inglés) de Julius Malema, de extrema izquierda y tercera fuerza antes de los comicios, que descienden al cuarto lugar con el 9,50 %.
Estos porcentajes se traducen en 58 escaños para el Partido MK y 39 para los EFF, respectivamente.
La entrada del partido de Zuma ha influido significativamente en la división del voto al CNA, afectado además por casos de corrupción como los protagonizados por el propio expresidente y por los problemas que enfrenta el país, como el alto desempleo, la criminalidad y los cortes de electricidad.
Primer gobierno de coalición
Con este escenario, el CNA se ve obligado a enfrentar un panorama desconocido: el de los acuerdos electorales que probablemente conducirán a la joven democracia sudafricana hacia su primer gobierno de coalición.
El partido gobernante histórico está dispuesto a negociar con cualquier formación, afirmó su secretario general, Fikile Mbalula, en una conferencia de prensa el domingo.
Esto incluye al nuevo partido de Zuma, que fue sancionado por el CNA por brindar su apoyo público al MK cuando aún era miembro del partido de Mandela.
Cerca de 28 millones de sudafricanos fueron convocados a las urnas en las elecciones generales y provinciales del miércoles.
A pesar del entusiasmo palpable en la población, la IEC registró una participación del 58,61 %, por debajo del 66 % de 2019.
Los sudafricanos votaron entre setenta partidos y once candidatos independientes para elegir a los 400 miembros de la Asamblea Nacional, que a su vez deberá seleccionar al presidente, así como a las autoridades de las nueve provincias del país.
Tras ser cuestionados por partidos como el MK y los EFF, la IEC aseguró que los comicios, supervisados por una misión de observación de la Unión Africana (UA), fueron “libres, justos y pacíficos”.
Con información de efectococuyo.com