En una reunión entre el abogado de Edmundo González Urrutia, José Vicente Haro, y el fiscal designado por la Constituyente de 2017, Tarek William Saab, se reveló la carta presentada por el embajador de carrera ante el Ministerio Público a través de su representante legal.
En la carta, González Urrutia explica las razones por las cuales no acudió a las tres citaciones realizadas por el despacho en relación con el caso de la publicación de actas electorales por parte de la oposición, con las que asegura haber ganado las elecciones presidenciales del 28 de julio, a pesar del anuncio del CNE y la validación del TSJ a favor de Nicolás Maduro.
El diplomático argumentó que su ausencia no se debe al desconocimiento de la institucionalidad jurisdiccional, sino a la falta de fundamentos de las citaciones y por motivos relacionados con el interés público y el recto entendimiento de la ley y el derecho, cuyos objetivos principales son la justicia y la paz.
“Me condenan por anticipado”
Además, González Urrutia señaló que altos funcionarios del gobierno lo han condenado previamente en diversas declaraciones por supuestos delitos, los cuales el embajador considera infundados debido a que la responsabilidad sobre la digitalización, resguardo y publicación de las actas de escrutinio no recaía en él.
El embajador resaltó la importancia de verificar imparcialmente las actas de escrutinio de todas las mesas de votación y publicar los resultados detallados, en línea con el respeto a la legalidad y la coherencia que ha caracterizado su trayectoria de 40 años de servicio público.
Amenaza de cárcel
En la parte final de la comunicación, González Urrutia instó al fiscal a ampliar el campo de la política democrática en lugar de estrecharlo mediante la judicialización del tema de las elecciones presidenciales, donde el pueblo venezolano expresó su voluntad.
Tras la tercera ausencia del diplomático a la citación, la Fiscalía solicitó una orden de captura en su contra y fue aprobada por un tribunal. Su abogado ha indicado que se encuentra en resguardo por motivos de seguridad, mientras que solo su esposa permanece en su residencia.