El subsecretario de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), monseñor Rafael Bitter, ha denunciado el trato “inhumano” al que están siendo sometidos seis opositores refugiados en la embajada de Argentina en Caracas. Estos ciudadanos llevan varios días sin suministro de agua y electricidad, lo que ha sido calificado como una acción despiadada.
Según monseñor Bitter, “Es inhumano cortar agua, luz. Creo que darles una oportunidad y el trato humano no se debe cortar”. Esta situación ha sido reportada por los propios opositores, quienes se encuentran bajo asedio constante por parte de organismos de seguridad, enfrentando restricciones en el acceso al agua potable y electricidad, lo que dificulta incluso la conservación de alimentos.
El representante de la Conferencia Episcopal ha expresado su solidaridad con los opositores refugiados y ha solicitado el cese inmediato del asedio. “Estamos llegando a Navidad, ¿y vamos a dejar que las cosas sigan igual? Como dice el papa Francisco, ‘bajemos’ y dejemos que podamos reunirnos en familia, sin lágrimas, en paz y tranquilidad. Que piensen también en este pueblo que necesita y en esta gente. Pasar una navidad en esta situación es doloroso, es triste”, afirmó.
Desde hace ocho meses, Pedro Urruchurtu, Magali Meda, el exdiputado Omar González, Claudia Macero, Humberto Villalobos y el exministro Fernando Martínez Mottola se encuentran bajo condición de refugio en la embajada, debido a investigaciones judiciales en su contra por supuesto terrorismo.
Monseñor Bitter también ha cuestionado las acciones de las autoridades, señalando que están actuando con el único objetivo de “ganar”. “Me sorprendió hasta dónde se puede llegar como ser humano a unos límites que no me importe más nada: sino romper, desbaratar y quitar. Que no me importe más nada sino simplemente imponer mi voluntad o quizás es querer ganar, vencer pero ¿a costa de qué?”, expresó.