La sagrada imagen de la Virgen del Valle regresó a lo alto de su templo en la Basílica de la isla de Margarita, luego de tres meses de estar cerca de sus fieles. La misa fue presidida por Monseñor Mariano José Parra, Arzobispo Emérito de Coro, en una ceremonia llena de feligreses que se llevó a cabo el domingo 8 de diciembre.
El repique de campanas marcó el inicio de la eucaristía a las 6 de la tarde en la iglesia de Valle del Espíritu Santo, seguido por la subida de la imagen de la Virgen del Valle, Patrona de Oriente. Este evento coincidió con la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, por lo que el mensaje de la misa se centró en la importancia de la humildad para cumplir los designios de Dios.
Durante la celebración, Monseñor Parra expresó su satisfacción por estar presente en esta importante fecha, destacando la devoción no solo en el oriente, sino también en Occidente y en todo el mundo. Hizo hincapié en la importancia de seguir el ejemplo de María, quien confió en Dios y aceptó sus designios con esperanza, a pesar de las dificultades.
La Virgen del Valle lució una nueva corona y un vestido diseñado por Carlos Ferrara, inspirado en el sol, las flores y símbolos marianos pintados a mano. La ceremonia fue un momento de profunda reverencia y devoción hacia la madre de Dios, resaltando la importancia de la fe y la confianza en los planes divinos en medio de las adversidades.