Dirigentes y partidos de oposición han expresado su rechazo ante la detención de Gregorio Graterol, presidente de Primero Justicia (PJ) en el estado Falcón. Graterol fue interceptado por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) en una alcabala en el sector El Cardón, en la carretera nacional Punto Fijo-Coro. La operación fue realizada por el GAES-13 del Destacamento N.º 131 del Comando Zona N.º 13 de la GNB, y ha sido catalogada como arbitraria por diversos sectores de la oposición venezolana.
Graterol viajaba en una camioneta Toyota junto a su sobrino Carlos Manuel Chiquito Graterol y el también miembro de PJ en Falcón José Rafael Granadillo Ortega, cuando fueron interceptados por los efectivos militares. Según información extraoficial, los políticos fueron detenidos por la presunta comisión de los delitos de conspiración, usurpación de funciones y financiamiento al terrorismo. Graterol es diputado de la Asamblea Nacional 2015.
El dirigente de PJ Juan Pablo Guanipa denunció que esta detención se enmarca en lo que se conoce como “efecto puerta giratoria”, donde se excarcelan presos políticos mientras se detienen a otros. Por su parte, la líder opositora María Corina Machado señaló que la detención de Graterol refleja la debilidad del Gobierno ante la respuesta popular e internacional a sus intentos de mantenerse en el poder. Machado describió a Graterol como un amigo comprometido con la democracia y la libertad de Venezuela, y llamó a presionar por la liberación inmediata de todos los presos políticos en el país.
Henrique Capriles Radonski, dirigente de PJ, cuestionó la acción gubernamental calificándola de ilegal y contraria a la paz política en Venezuela. Capriles expresó su condena y rechazo a estas detenciones, que se suman a más de 1800 venezolanos inocentes tras las rejas. Destacó que la paz no se construye llenando las cárceles de inocentes ni violando los derechos de aquellos que piensan diferente.