El Ministro de Relaciones Exteriores, Yván Gil, anunció recientemente que Venezuela está abierta para que los migrantes regresen al país, ya que la economía se encuentra en constante crecimiento. Esta declaración se dio tras su participación en una reunión con funcionarios de 10 países latinoamericanos, donde se discutió una estrategia conjunta para hacer frente a las posibles deportaciones masivas de migrantes por parte de la administración de Donald Trump.
Durante la reunión, el canciller de Nicolás Maduro enfatizó la importancia de promover una gestión ordenada, segura, regular, responsable y humana en el proceso migratorio. Según Gil, a pesar de las medidas unilaterales coercitivas, la economía venezolana sigue creciendo y está abierta a recibir a los ciudadanos que regresan al país después de haber migrado debido al bloqueo imperialista.
En este contexto, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México organizó un encuentro con representantes de Belice, Brasil, Colombia, Cuba, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México y Venezuela. El objetivo de la reunión fue coordinar acciones para proteger los derechos humanos de los migrantes, prevenir abusos y malos tratos, y fomentar una migración regular, segura y ordenada.
La colaboración entre estos países busca integrar a las poblaciones migrantes y garantizar un enfoque humanitario en la gestión de la migración. Ante los desafíos actuales en materia migratoria, se busca establecer una estrategia conjunta que permita afrontar las amenazas de deportaciones masivas y proteger los derechos de los migrantes en la región latinoamericana y del Caribe.