Un joven venezolano de 24 años de edad vivió una experiencia impactante al ser tragado y luego expulsado por una ballena jorobada mientras remaba en un bote inflable en el estrecho de Magallanes, cerca de Punta Arenas, en el sur de Chile.
El incidente fue captado en video por la cámara que portaba Dell Simancas, padre del joven, Adrián Simancas, durante una travesía en el sector de Bahía del Águila. En las imágenes, se puede observar cómo la ballena atrapa al kayakista junto a su bote y luego lo libera, dejando a todos sorprendidos.
A pesar del susto, Adrián no sufrió heridas ni lesiones, lo que permitió que su padre pudiera auxiliarlo y llevarlo a tierra firme después de 30 minutos en aguas frías y peligrosas.
El joven compartió su experiencia en varios medios de comunicación locales, describiendo cómo sintió el impacto de la ballena y la sensación de ser succionado por el animal marino. Afortunadamente, su padre, con experiencia en situaciones de riesgo, pudo ayudarlo a salir ileso de la situación extrema.
El incidente tuvo lugar en las aguas cercanas al Faro San Isidro, en la Bahía El Águila, en el Pacífico sur, mientras Adrián realizaba una travesía en packraft junto a su padre. A pesar de la estrechez de la garganta de las ballenas jorobadas, es posible que accidentalmente atrapen a humanos al alimentarse, pero generalmente los escupen de vuelta al mar debido a su incapacidad para ingerirlos.
Esta historia sorprendente nos recuerda la belleza y la imprevisibilidad de la naturaleza, así como la importancia de contar con los conocimientos y la calma necesarios para enfrentar situaciones inesperadas en entornos naturales.