Los líderes opositores María Corina Machado y Edmundo González, este último reconocido por numerosos países como el presidente electo de Venezuela, lanzaron un comunicado conjunto relacionado con la disputa territorial por el Esequibo, reafirmando su posición de que esa región pertenece a Venezuela.
«El Esequibo es de Venezuela y nosotros sí lo defenderemos», se titula el comunicado, en el cual, los dirigentes argumentan que títulos históricos y jurídicos sólidos que se remontan a la Capitanía General de Venezuela reivindican que el territorio Esequibo es venezolano.
«El Laudo Arbitral de París de 1899, producto de componendas y chantajes, nos arrebató arbitrariamente lo que nos pertenece por derecho y justicia, conteniendo vicios insalvables que lo hacen nulo», se lee en el texto.
Y añade que gracias a la diplomacia venezolana del siglo XX y la «labor seria», responsable y sistemática de los gobiernos de entonces, se reconoció la injusticia del mencionado Laudo Arbitral y se condujo al Acuerdo de Ginebra de 1966, que busca que Venezuela y Guyana encuentren soluciones aceptables para ambas partes.
«Sin embargo, la reclamación activa del Esequibo fue abandonada de manera irresponsable por Hugo Chávez, por razones eminentemente políticas, llegando incluso a señalarla como una herencia de la Guerra Fría que Venezuela no debía continuar, siguiendo los mandatos de Fidel Castro para congraciarse con países caribeños en foros como la OEA y la ONU, a cambio de apoyo político. Nicolás Maduro continuó con esa política irresponsable y permitió durante años a Guyana el otorgamiento de concesiones de explotación de recursos en las zonas en reclamación«, expresaron Machado y González.
Y atribuyeron a la «traicionera negligencia» del gobierno venezolano facilitar que el secretario general de la ONU, «a tenor de las previsiones del Acuerdo de Ginebra», transfiriese a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) la cuestión, «abriéndole a Guyana la oportunidad de demandarnos ante la misma».
«Chávez y Maduro no tomaron las acciones necesarias para evitar o revertir a tiempo esta situación. Ahora, habiendo afirmado la CIJ su competencia, en diciembre de 2020, el juicio en La Haya continúa, por lo que Venezuela debe defender con firmeza y diligencia sus derechos ante esa instancia«, indicaron los opositores.
También reivindicaron la importancia de «defender con determinación y profesionalismo nuestra soberanía sobre la fachada atlántica de Venezuela, correspondiente a los estados Sucre, Delta Amacuro y Monagas, incluso independientemente de la reclamación del Esequibo continental».
Los dirigentes calificaron como «inaceptable» la pretensión de Guyana de «querer cerrar la proyección marina de nuestra fachada atlántica, con el otorgamiento de conceciones petroleras sobre áres de indiscutible jurisdicción venezolana».
También aseguraron que se oponen rotundamente a cualquier posición bélica y ratificaron que tienen equipos listos para una defensa efectiva y pacífica.
«Venezolanos, como gobierno electo, tenemos nuestros equipos listos pata ejercer la defensa efectiva y responsable de nuestra soberanía nacional. Están integrados por los más competentes y experimentados profesionales en el ámbito legal, diplomático, histórico y militar, para representar y defender a Venezuela ante la CIJ y cualquier otra instancia en la que sea necesario actuar».
El texto finaliza señalando la urgencia de «la transición democrática ordenada por los venezolanos el 28 de julio, para que el presidente electo pueda dirigir una política exterior seria y responsable que permita avanzar en nuestra legítima reclamación hasta lograr una solución satisfactoria».

