La junta militar de Myanmar (Birmania), que detenta el poder desde el golpe de Estado de 2021, elevó este martes la cifra de fallecidos por el terremoto a 2.719, mientras que se contabilizan 4.521 heridos por el potente sismo de magnitud 7,7 que sacudió a ese país a Tailandia el viernes pasado.
El portavoz del régimen, Zaw Min Tun, dijo a la agencia EFE que más de 8,5 millones de personas se han visto afectadas por la catástrofe. Además, un nuevo sismo de magnitud 5 se sintió este marte cerca de Mandalay, donde tuvo el epicentro el terremoto.
Asimismo, un rescatista dijo a la agencia que se han suspendido algunas de las operaciones de búsqueda, ante la baja probabilidad de que queden sobrevivientes.
Por su parte, en Tailandia se contabilizan al menos 20 muertos y 70 desaparecidos, la mayoría de ellos en un rascacielos en construcción que se desplomó.
El viernes circularon numerosos videos en las redes sociales y medios de comunicación que permitieron observar escenas apocalípticas en ambas naciones, donde se desplomaron templos sagrados, edificios y carreteras.
Muchos de los videos mostraban el impacto de las piscinas en las alturas, ya que el agua se derramó y, en algunos casos, causó «olas» que arrastraron a ciudadanos en las calles. De igual manera, otro de los videos más impactantes mostraba el desplome de una grúa de construcción, cuyo operador salió despedido por el aire.
De igual manera, el derrumbe del edificio tailandés que se encontraba en la fase final de construcción provocó una nube de escombros que se expandió por la ciudad de Bangkok.
