La tasa de desempleo en Brasil ha caído al 7,9% de la población económicamente activa en el trimestre que concluyó en julio, alcanzando su nivel más bajo en los últimos ocho años, según informó el Gobierno este jueves.
En comparación con el trimestre anterior (febrero a abril de este año), la tasa de desempleo disminuyó un 0,6% (era del 8,5%) y se redujo un 1,2% en comparación con el mismo trimestre del año anterior (9,1%), según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
No se había registrado un nivel de desempleo tan bajo en Brasil desde febrero de 2015, antes de que el país experimentara una grave recesión que duró dos años.
Según el organismo, la mayor economía de América Latina tenía 8,5 millones de desempleados en el trimestre que finalizó en julio, un 13,8% menos que en el mismo período de 2022 (9,9 millones) y un 6,3% menos que en el trimestre anterior (9,1 millones).
Esto significa que en el último año, al menos 1,36 millones de brasileños abandonaron la categoría de desempleados.
La disminución del número de desempleados se debe principalmente al aumento del 1,3% en el número de personas empleadas en el último año, alcanzando los 99,3 millones en el trimestre concluido en julio. Esto significa que el país generó 1,3 millones de nuevos empleos en doce meses.
La mayoría de estos nuevos puestos de trabajo abiertos en el último año corresponden a empleos formales generados por el sector privado (1,2 millones). Esto ha permitido que el número de brasileños contratados formalmente por empresas aumente un 3,4% en el último año, llegando a 37 millones.
Según el estudio, el aumento del empleo formal también ha contribuido a una disminución de la tasa de informalidad entre los trabajadores brasileños, pasando del 39,8% en el trimestre concluido en julio de 2022 al 39,1% en el trimestre anterior.
A pesar de la fuerte caída del desempleo en el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, que asumió en enero, los economistas prevén que la tasa pueda aumentar nuevamente en los próximos meses debido a que se espera un crecimiento económico del 2,3% para 2023, por debajo de la expansión del 2,90% en 2022 y del 5,0% alcanzado en 2021.
Para evitar que la desaceleración económica impacte en el mercado laboral, y después de varias presiones del líder progresista, el Banco Central inició el mes pasado un proceso de reducción gradual de los intereses, que estaban en su nivel más alto en los últimos seis años.
EFE