El Reino Unido planea enviar un barco de guerra a Guyana en medio de la disputa territorial con Venezuela. Esta acción ha sido descrita como un gesto de “apoyo diplomático y militar” a la antigua colonia británica. Sin embargo, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha denunciado este movimiento como una “amenaza militar” y una violación de los acuerdos de Argyle, firmados en diciembre pasado para resolver pacíficamente el diferendo.
En esos acuerdos, Venezuela y Guyana acordaron no amenazarse ni utilizar la fuerza para resolver sus diferencias territoriales, comprometiéndose a buscar una convivencia pacífica. Sin embargo, la decisión del Reino Unido de enviar un barco de guerra ha generado tensiones y la respuesta de Maduro no se ha hecho esperar.
Durante su mensaje de fin de año a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb), Maduro ordenó la activación de una “acción militar conjunta de defensa” en el Caribe oriental de Venezuela. Además, alertó a los militares sobre posibles enemigos internos financiados desde el extranjero y enemigos externos, especialmente el “imperio norteamericano”.
Maduro hizo hincapié en la importancia de que la Fanb esté preparada para enfrentar estas amenazas, fortaleciendo la capacidad de inteligencia y contrainteligencia a nivel nacional e internacional. Según él, es necesario estar un paso adelante de los enemigos de Venezuela y estar alerta para garantizar la victoria de la unión cívico-militar-policial.
La situación sigue siendo tensa y se espera que el envío del barco de guerra por parte del Reino Unido genere más repercusiones en la disputa territorial entre Guyana y Venezuela.