Dirigentes del chavismo, liderados por Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, conmemoraron en el distribuidor Altamira el fallido intento de alzamiento militar del 30 de abril de 2019.
En aquel momento, Leopoldo López, coordinador nacional de Voluntad Popular, escapó de su arresto domiciliario y junto al entonces presidente interino, Juan Guaidó, anunciaron la denominada “Operación Libertad” desde este emblemático lugar en la capital venezolana.
Sin embargo, horas después del intento de alzamiento, López se refugió en la embajada de España en Caracas, mientras que los militares involucrados buscaron protección en otras legaciones diplomáticas.
Cabello expresó en sus redes sociales que “derrotamos al imperialismo y a sus aliados en su intento de golpe de estado, encontrándose con la firme determinación de un pueblo que busca vivir en libertad y paz. Cada vez que lo intentan, salen derrotados. Sigamos unidos en el camino trazado por Chávez”.
Cabello insta a no confiar en la oposición
La alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez, quien en ese momento era gobernadora del estado Lara, estuvo presente en Altamira la madrugada del 30 de abril.
En sus redes sociales, Meléndez destacó la importancia de defender la soberanía, seguridad y paz, recordando la rápida respuesta del Poder Popular, la FANB y los organismos de seguridad durante ese día.
El ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Remigio Ceballos, también participó en lo que el chavismo denomina “unión cívico-militar”.
En el sitio web de Cabello se recogen declaraciones de su discurso, en el que advierte sobre la oposición venezolana. “No debemos confiar en la oposición venezolana que hoy habla de elecciones, sabemos que no desean elecciones, sino acabar con el ‘régimen’ como ellos lo llaman”, afirmó.
Señaló que el “castigo” para quienes participaron en la Operación Libertad es el exilio, similar al de López y Guaidó, quienes abandonaron el país en los últimos años.