El comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, se encuentra en un momento crucial de su carrera, a las puertas de lo que podría ser su último contrato en el cargo. Con el deseo de dejar un legado marcado por la innovación, Manfred tiene dos objetivos principales en mente para este periodo: nacionalizar las transmisiones de la ronda regular y eliminar las restricciones que actualmente existen en cuanto a los detalles televisivos.
En una reciente entrevista para The Athletic, Manfred explicó que su interés en nacionalizar las transmisiones surge en respuesta a la declaración de bancarrota de Bally Sports. El comisionado expresó su deseo de tener todos los derechos disponibles, de hablar con todos los compradores, de crear paquetes y venderlos en la mayor cantidad posible. Una vez logrado esto, se ocupará de manejar lo que quede pendiente.
La posibilidad de nacionalizar las transmisiones se vislumbra para el año 2028, cuando finalicen los acuerdos con todas las compañías y el equipo de Manfred tenga la libertad total para negociar sobre los derechos televisivos. En palabras del comisionado, “Si quieres hacer un cambio, debes demostrar que lo que estás ofreciendo es mejor. Creo que hay una combinación de cosas que podemos demostrar que es beneficiosa para todos, incluso para los equipos más grandes”.
En la actualidad, en Estados Unidos, las personas solo pueden ver los partidos de los equipos de su ciudad, lo que ha tenido un impacto negativo en el deporte en general. La intención de Manfred es cambiar esta dinámica y abrir nuevas posibilidades para los aficionados y para la industria del béisbol.