La Asamblea Nacional (AN) de 2020 aprobó un acuerdo en su plenaria declarando a los expresidentes de Colombia, Álvaro Uribe e Iván Duque, como «enemigos públicos» por promover una intervención humanitaria en Venezuela a través de la ONU para derrocar a Nicolás Maduro. Durante la sesión, los parlamentarios del chavismo liderados por el presidente de la AN, Jorge Rodríguez, lanzaron insultos contra los exmandatarios colombianos, calificándolos de «narcotraficantes, paramilitares, fascistas, asesinos y criminales».
El acuerdo aprobado incluye el respaldo a posibles acciones legales llevadas a cabo por el fiscal general, Tarek William Saab. El fiscal anunció previamente su intención de solicitar una alerta roja a Interpol contra Leopoldo López, exiliado en España, por su supuesta instigación a una intervención militar extranjera en Venezuela, en línea con las acciones de Uribe Vélez.
En respuesta a las acusaciones, Jorge Rodríguez desafió a Uribe y Duque a liderar una invasión en Venezuela junto a opositores como Julio Borges, López y Edmundo González. Este último, tras un supuesto accidente de tránsito en Estados Unidos, publicó un video junto a su esposa afirmando que «el trabajo no se detiene».
Por su parte, Álvaro Uribe Vélez solicitó a la ONU tomar medidas para sacar a Maduro del poder, argumentando que no fue elegido por el pueblo en las elecciones del 28 de julio. Rodríguez respondió asegurando que estarían esperando a Uribe y sus seguidores con la Fuerza Armada, el pueblo y las fuerzas policiales venezolanas.
Durante la sesión legislativa, el diputado Pedro Carreño acusó a Uribe de vínculos con el cartel de Medellín y de introducir el paramilitarismo en Latinoamérica. La Alianza Democrática pidió contundencia contra Uribe Vélez, solicitando una extradición por instigar a un delito y enfrentarse a la justicia venezolana. La plenaria ratificó a Francisco Ameliach como representante de la AN ante el Consejo de Estado.