El presidente colombiano, Gustavo Petro, y su gabinete fueron los protagonistas de un caótico consejo de ministros que se extendió por más de cuatro horas. Por primera vez, esta reunión se transmitió por televisión y redes sociales, mostrando las fracturas internas del Gobierno.
Petro decidió transmitir la sesión argumentando que la democracia implica que el pueblo pueda vigilar y participar en las decisiones del Gobierno, ya que considera que todo acto administrativo debe ser público y transparente.
Sin embargo, el consejo de ministros se convirtió en un escenario de confrontación, donde varios funcionarios, encabezados por la vicepresidenta Francia Márquez, criticaron decisiones del presidente, como el regreso de Armando Benedetti, acusado de corrupción, al Gobierno como jefe de despacho, y el excesivo poder de la canciller Laura Sarabia.
Petro, quien se encuentra en el último año y medio de su mandato, también aprovechó la reunión para cuestionar los resultados de algunos de sus ministros y abordar temas como la crisis diplomática con EE.UU. y el apoyo de Venezuela para enfrentar la violencia guerrillera en la frontera.
El punto de quiebre lo marcó la vicepresidenta, quien manifestó públicamente su desacuerdo con el nombramiento de Benedetti y criticó a Sarabia. Otros funcionarios se unieron a su crítica, expresando su preocupación por la presencia de personas no alineadas con el proyecto progresista en el Gobierno.
En cuanto a las relaciones internacionales, Petro aprovechó el consejo de ministros para criticar nuevamente al presidente Trump y elogiar el apoyo de Venezuela en la desactivación de campamentos del ELN en su territorio, como parte de una estrategia diplomática exitosa.
Al cierre de la reunión, el director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República destacó la audacia y transparencia de transmitir el consejo por medios de comunicación, pero señaló la necesidad de revisar la metodología para lograr una comunicación efectiva con el pueblo colombiano.
El caótico consejo de ministros en la Casa de Nariño generó una amplia repercusión en las redes sociales, donde los ciudadanos expresaron con sarcasmo sus opiniones sobre las declaraciones y acciones de Petro y su gabinete.