La Canciller de Colombia, Laura Sarabia, presentó su renuncia protocolaria después de que el presidente Gustavo Petro solicitara la renuncia de todo su gabinete de ministros y funcionarios de alto rango. Sarabia, quien llevaba solo once días en el cargo, expresó que no hay mayor privilegio que servir al pueblo colombiano y decidió renunciar para que el presidente pueda tomar las decisiones que considere más adecuadas.
Esta renuncia se dio en medio de una crisis en el gobierno de Petro, desencadenada por una polémica reunión del gabinete ministerial el pasado martes. Durante la reunión, se produjeron confrontaciones y críticas por parte de varios funcionarios, entre ellos la vicepresidenta Francia Márquez, quien cuestionó la designación de Armando Benedetti, acusado de corrupción, como jefe de despacho, y el excesivo poder de la canciller Laura Sarabia.
Tras la solicitud de renuncia de Petro a su gabinete, la Ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, también presentó su renuncia irrevocable, destacando su trabajo a favor de los trabajadores colombianos. Petro, por su parte, manifestó que el gobierno se enfocará en cumplir su programa durante los 18 meses restantes de su mandato.
La tensión en el gobierno de Petro se hizo evidente durante la reunión del gabinete transmitida por televisión y redes sociales, donde se expusieron las divisiones internas. La crítica a las decisiones del presidente y las discrepancias sobre la dirección del gobierno fueron temas recurrentes en el encuentro, reflejando la fractura dentro del gobierno.
La renuncia de Sarabia y Ramírez se suman a una serie de cambios en el gabinete de Petro, en un contexto de crisis política que ha generado una oleada de renuncias. La situación en el gobierno colombiano sigue siendo incierta, con la expectativa de posibles cambios y reestructuraciones en el equipo ministerial en los próximos días.