En una labor humanitaria sin precedentes, la Cruz Roja desplegó una jornada de salud el pasado jueves 4 de julio en Cumanacoa, estado Sucre, para atender a más de 280 personas afectadas por las recientes inundaciones. Durante este evento, se ofrecieron diversos servicios médicos, que incluyeron desparasitación, consultas médicas generales y entrega de medicamentos.
Luis Farías, presidente de la organización, destacó la importancia de esta iniciativa y anunció la creación de un punto de contacto para que los damnificados por el desbordamiento del río Manzanares puedan comunicarse con sus familiares. Además, resaltó la participación de más de 80 voluntarios de Sucre, altamente capacitados y listos para actuar en situaciones de emergencia.
Farías también informó que se ha establecido un equipo de socorristas y voluntarios enfocados en la gestión de riesgos y el saneamiento, además de colaborar estrechamente con las autoridades para implementar una planta de tratamiento de agua potable en la zona afectada.
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