El gobierno de Nicolás Maduro guarda silencio sobre el tema de Monómeros, mientras que la administración de Gustavo Petro ha decidido intervenir en la empresa de fertilizantes con sede en Barranquilla a través de la Superintendencia de Sociedades. Esta intervención tiene como objetivo preservar el activo como unidad productiva y fuente generadora de empleo, en lugar de simplemente pedir a Miraflores que reconsidere la venta de la empresa.
En un comunicado emitido por Supersociedades el 18 de noviembre, se explicó que la medida de control sobre Monómeros no implica una toma de posesión, sino que busca prevenir posibles riesgos que podrían afectar el interés general. La venta de Monómeros podría generar riesgos de insolvencia, por lo que la intervención de Supersociedades tiene como objetivo evitar una venta del activo que perjudique al agro colombiano.
Monómeros, filial de Pequiven, es responsable de casi el 30% de la producción de fertilizantes en Colombia y abastece al 80% del campesinado colombiano. Por lo tanto, su operatividad es crucial para el gobierno de Petro. Expertos han señalado las condiciones poco transparentes de la posible venta de Monómeros, lo que ha llevado a Colombia a intervenir en la situación.
Posible tensión diplomática
La intervención de Colombia en Monómeros se suma a la tensión existente entre los dos países por otros temas, como el reclamo de Colombia para que el Poder Electoral venezolano publique las actas de escrutinio y demuestre la legitimidad de la victoria de Maduro en las elecciones del 28 de julio. Esta situación podría complicar las relaciones entre ambos países, que anteriormente se mostraban como aliados ideológicos.
Para Nastassja Rojas, politóloga, la relación entre Petro y Maduro es compleja y ambigua. Petro ha criticado la gestión de Maduro en las elecciones presidenciales, pero también ha mantenido una postura cercana al gobierno venezolano en temas como las sanciones internacionales. La postura futura de Petro frente a Maduro aún es incierta, especialmente considerando la importancia de los activos venezolanos en Colombia.
Mediación fallida
A pesar de los intentos de Petro y Lula de mediar en la situación venezolana, esta mediación no ha tenido éxito y ha sido más un ejercicio mediático que una verdadera negociación. La falta de voluntad política por parte del régimen de Maduro para reconocer a Petro como mediador ha dificultado cualquier intento de diálogo.
En resumen, la intervención de Colombia en Monómeros y la tensión existente entre Petro y Maduro podrían llevar a una mayor complicación en las relaciones diplomáticas entre ambos países. La incertidumbre sobre el futuro de esta relación y la postura de Petro frente a Maduro añaden un elemento de inestabilidad a la situación actual.