El cabo primero Nahuel Agustín Gallo, perteneciente a la Gendarmería Nacional Argentina, fue arrestado el 8 de diciembre de 2024 por el Gobierno de Nicolás Maduro al ingresar a Venezuela desde Colombia a través del Puente Internacional Simón Bolívar, en Táchira.
Las autoridades venezolanas han afirmado que Gallo está implicado en actividades de espionaje, aunque hasta el momento no han presentado pruebas contundentes que respalden dicha acusación.
El viaje de Gallo estaba correctamente planificado y respaldado por la normativa venezolana. El 22 de noviembre, presentó la “Carta de invitación” requerida a las autoridades venezolanas, la cual detallaba el motivo del viaje, el lugar de alojamiento y las personas a visitar. Este trámite fue validado el mismo día por el Servicio Autónomo de Registros y Notarías (SAREN), asegurando que Gallo pudiera ingresar sin inconvenientes.
Gallo tenía planeado ingresar a Venezuela desde Colombia por vía terrestre y hospedarse en su residencia en Puerto La Cruz, a más de 1.200 kilómetros del paso fronterizo. Todo indicaba que el gendarme iba a realizar una visita familiar durante su período de licencia laboral, autorizado desde el 5 de diciembre de 2024 hasta el 3 de enero de 2025.
Tras la confirmación oficial por parte del Gobierno de que Nahuel Gallo está detenido y acusado de desestabilización y “acciones terroristas”, la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, acusó al fiscal general venezolano, Tarek William Saab, de mentir descaradamente.
El gobierno argentino rechazó las acusaciones de espionaje contra Nahuel Gallo y las calificó como una gran mentira. Durante una reunión con los familiares del gendarme, Bullrich y Gerardo Werthein, canciller argentino, aseguraron que las imputaciones carecen de fundamentos y detallaron las irregularidades en el arresto.
La Fiscalía anunció que investigará a la ministra Bullrich y al canciller Werthein por sus declaraciones en el caso del gendarme detenido, considerando que podrían atentar contra la seguridad nacional. Según la Fiscalía, las investigaciones realizadas revelan que en la cadena de mando del grupo de terroristas enviados desde Argentina está involucrada la ministra Bullrich.
Nahuel Gallo fue procesado por la Justicia de Venezuela por su presunta vinculación a un grupo de personas que intentaron llevar a cabo acciones desestabilizadoras y terroristas con el apoyo de grupos de la ultraderecha internacional.