La reconocida actriz estadounidense Sharon Stone ha revelado en una entrevista con la revista People que sufre convulsiones si duerme menos de ocho horas. Stone, quien hace 20 años sufrió un derrame cerebral que estuvo a punto de costarle la vida, asegura que necesita un sueño ininterrumpido para que su medicación cerebral funcione adecuadamente y evitar las convulsiones.
“Durante mucho tiempo, quise fingir que estaba bien”, confesó la actriz. “Necesito ocho horas de sueño ininterrumpido para que mi medicación cerebral funcione y no tener convulsiones. Así que hay que contratarme como discapacitada, y por eso no me contratan mucho”, admitió Stone.
Stone también habló sobre las consecuencias que tuvo el derrame cerebral en su vida. “Lo perdí todo. Perdí todo mi dinero. Perdí la custodia de mi hijo. Perdí mi carrera. Perdí todas esas cosas que crees que son tu verdadera identidad y tu vida”, reveló la actriz. Aunque nunca ha logrado recuperar la mayor parte de lo perdido, ahora se siente aliviada de poder hablar abiertamente sobre su experiencia.
La actriz explicó que siempre fue educada con la creencia de que debía cuidar de los demás, pero finalmente se dio cuenta de que no tiene por qué encajar con los demás y que está bien recibir cuidados, especialmente como persona discapacitada. Stone se siente orgullosa de haber sobrevivido a su tragedia y de poder ayudar a los demás.
El derrame cerebral que sufrió Stone en 2001 la dejó con solo un 1% de posibilidades de sobrevivir. Durante su proceso de recuperación, la actriz experimentó dificultades como tartamudeo y problemas de visión, así como pérdidas de memoria a largo plazo. En aquel momento, Stone y su esposo adoptaron a su hijo Roan, quien ahora tiene 23 años. Sin embargo, en 2004, su matrimonio terminó y Stone perdió la custodia de su hijo. Además, Hollywood dejó de ofrecerle papeles.
A pesar de todas las dificultades, Stone ha encontrado una nueva misión en su vida. Actualmente forma parte del consejo de la Fundación Neurológica Barrow, cuya misión es salvar vidas. La fundación apoya a un instituto médico dirigido por el neurocirujano Michael Lawton, quien salvó la vida de Stone en su momento. Según Lawton, Stone es una inspiración para todos los que sufren enfermedades neurológicas.