La controversia reciente se ha desatado en torno a una fotografía en la que la reina aparece acompañada de los miembros más jóvenes de la familia real.
Una imagen oficial que incluye a Kate, princesa de Gales, ha sido objeto de manipulación digital, según una destacada agencia de fotografía, generando una segunda polémica por retoques precisamente cuando Kate reapareció en público después de varios meses.
Getty Images informó que la fotografía de la Reina Isabel con sus nietos y bisnietos, capturada por Kate y publicada por el Palacio de Kensington el año pasado, ha sido “mejorada digitalmente”, y un análisis de la CNN encontró indicios de alteraciones en 19 lugares.
Este escándalo surge después de que una fotografía del Día de la Madre de Kate y sus hijos, supuestamente tomada por el príncipe William, también fuera retocada. Kate emitió disculpas el pasado lunes y manifestó su interés en “experimentar” con la edición de imágenes.
Las inconsistencias descubiertas recientemente en una segunda fotografía real ponen a Kate en el centro de más interrogantes, amenazando con afectar las relaciones de la realeza con las principales agencias de noticias y fotografía.
Esta controversia no será bien recibida por los príncipes de Gales, ya que surge en medio de un periodo de intensa atención sobre la salud y bienestar de la princesa.
El sábado, el príncipe William y Kate fueron vistos y fotografiados en una tienda agrícola cerca de su residencia, disipando las dudas sobre su estado de salud.
La princesa también fue fotografiada a principios de este mes saliendo de su coche privado en el castillo de Windsor, donde asistió a una cita privada el 11 de marzo, según lo informado anteriormente por el Palacio de Kensington a CNN.
No se había visto a Kate en público desde que se sometió a una operación abdominal en enero.
La más reciente polémica se centra en una foto publicada en abril de 2023, en la que la reina -fallecida en septiembre anterior- aparece rodeada por 10 de sus jóvenes parientes.
El Palacio indicó que la imagen fue capturada por Kate en el castillo de Balmoral, en Escocia, durante los meses previos al fallecimiento de la Reina, aunque las correcciones han generado confusión sobre si la imagen fue realmente compuesta a partir de varias tomas diferentes.
En su breve disculpa por la foto del Día de la Madre, Kate no explicó por qué modifica sus fotografías ni por qué el Palacio de Kensington no reveló los cambios a las agencias de fotografía.
La reprimenda por parte de Getty y otras agencias va más allá de una simple vergüenza para la realeza.
La familia real, al igual que innumerables gobiernos e instituciones en todo el mundo, confía en las agencias para distribuir sus imágenes a los medios de comunicación.
Sin embargo, estas empresas tienen normas estrictas que solo permiten una edición mínima; al manipular secretamente sus imágenes en varios lugares, la realeza se ha expuesto como potencial distribuidora de desinformación.
Getty, en particular, ha mantenido una estrecha relación con el Palacio de Kensington desde hace tiempo; a menudo ha sido invitada a realizar sesiones fotográficas de la realeza y ha patrocinado eventos reales.
Kate se ha tomado un descanso de sus compromisos públicos mientras se recupera de su intervención quirúrgica, una ausencia prolongada que ha dado lugar a una serie de teorías conspirativas en Internet y cuestionamientos sobre su salud en los medios británicos.
Por su parte, el Rey Carlos III ha asumido tareas más livianas después de anunciar su diagnóstico de cáncer en febrero.
Sé el primero en recibir la información en tu celular. Únete al grupo de Diario Primicia en WhatsApp a través del siguiente enlace: https://chat.whatsapp.com/
También nos encuentras en Telegram como @DiarioPrimicia, únete aquí: https://t.me/