El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha declarado al grupo delictivo conocido como Tren de Aragua como un «grupo terrorista de crimen organizado». Este grupo criminal, originario de las cárceles de Venezuela, ha extendido sus operaciones ilícitas a varios países de Suramérica.
Noboa anunció esta medida después de reunirse en Quito con el líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia, quien se autoproclama como presidente legítimo de Venezuela y es reconocido como tal por el Gobierno ecuatoriano. Mediante un decreto, el mandatario ecuatoriano justificó esta decisión al considerar que el Tren de Aragua representa una amenaza para la población nacional, el orden constituido, la soberanía e integridad del Estado.
Esta designación sigue los pasos de Estados Unidos, donde el presidente Donald Trump también catalogó al Tren de Aragua como una organización terrorista la semana pasada. Desde el año pasado, Ecuador se encuentra en un conflicto armado interno contra el crimen organizado, considerando a cualquier banda criminal que opere en el país como un grupo terrorista, especialmente aquellas con conexiones con los carteles mexicanos.
Aunque no hay evidencia pública significativa de la presencia del Tren de Aragua en Ecuador, el presidente ecuatoriano citó un informe de inteligencia nacional que sugiere que el grupo venezolano tiene incidencia en el territorio ecuatoriano. En Ecuador, bandas como Los Choneros, Los Lobos, Los Águilas, Latin Kings y Chone Killers dominan la escena del crimen organizado, dedicándose principalmente al narcotráfico, extorsiones, secuestros y minería ilegal.
Estas bandas están detrás de la creciente violencia en Ecuador, que llevó al país a tener la tasa más alta de homicidios en 2023, con 47.2 por cada 100,000 habitantes, ocho veces más que en 2016, según el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO).