El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) ha denunciado recientemente que la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) ha ordenado el cierre de la emisora de radio Criolla 100.7 FM, en Ciudad Bolívar. Esta medida se llevó a cabo el pasado viernes 24 de enero, dejando a cinco trabajadores sin empleo, así como a los integrantes de seis producciones independientes.
Según las denuncias recibidas, Conatel argumentó que la emisora no contaba con la autorización correspondiente y operaba de manera clandestina. Como consecuencia, el regulador confiscó equipos como un transmisor, una consola, una computadora y un CPU que pertenecían a la radio.
Luis Bello, director de Criolla 100.7 FM, manifestó que había solicitado la habilitación ante Conatel, pero no recibió respuesta alguna. Ante esta situación, expresó: «Llegaron alegando lo que simple y llanamente le alegan a todo el mundo: que somos una emisora clandestina e ilegal y que no deberíamos estar violentando el espacio radioeléctrico que maneja el Estado».
Se ha conocido que desde el año 2009 se encontraban a la espera de una respuesta por parte de Conatel para poder operar de manera legal. Organizaciones como Espacio Público han señalado que el cierre de Criolla 100.7 FM atenta contra el derecho al debido proceso y a la libertad de expresión, tal como lo establece la Constitución venezolana.
En este sentido, la falta de respuestas por parte de Conatel a las solicitudes de habilitación de esta y otras emisoras evidencia un patrón que dificulta la operatividad con todos los permisos en regla, lo que facilita el cierre discrecional de emisoras sin derecho a la defensa.
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